martes, 24 de enero de 2012

LAS MASCOTAS

Veo en Frank de la Jungla que a un ignorante se le ocurrió comprarse un cachorro de leona para alardear de mascota exótica. La tuvo encerrada 16 años en una celda diminuta y el veterinario le extirpó las garras "por seguridad". Ahora buscaba ayuda para darle al obeso y enfermo animal una vida mejor.

No es la primera vez que oigo que a un felino (normalmente gatos) le operan las uñas para que no arañe.  Como tortura me parece de una crueldad refinadamente sádica. Hace unos días publiqué un artículo de Silvestrismo en que imaginaba una civilización extraterrestre más avanzada que nos tratara como nosotros nos comportamos con nuestras mascotas. En este caso equivaldría a que nos amputaran los dedos de las manos "por seguridad". Sin dedos seríamos mucho menos peligrosos. Con un muñón en lugar de manos seguro que les daríamos muchos menos problemas. Claro que podríamos hacer menos cosas, pero en cautividad tampoco se notaría la diferencia. No haría falta trabajar porque ellos nos alimentarían. Estaríamos encerrados en espacios reducidos donde ya nos lo darían todo hecho para que no echáramos de menos nuestros dedos... sin éxito, claro...

Otras torturas estéticas tal vez no fueran tan traumatizantes, orejas cortadas en punta, dedos de los pies amputados (como símil a acortar el rabo, la alternativa no la quiero ni plantear). Castraciones, esterilización, mutilaciones, chips, tatuajes, jerseycillos horteras, doma, aislamiento, soledad, alimentación basura,... y siempre, siempre, restricción de hábitat y confinamiento en habitáculos reducidos.

Me estoy centrando en las mascotas. Por supuesto, si se alimentaran de nosotros el trato sería mucho más brutal. Camiones de cachorros humanos apiñados para ser llevados al matadero, mujeres ordeñadas, todos castrados y hormonados con mil productos químicos para engordarnos y ser más sabrosos... no lo quiero ni pensar. Preferiría ser la mascota fiel de algún alien y que al menos me diera cariño y se apenara el día de mi muerte...

Yo tuve un perro. Rescatado in extremis del corredor de la muerte. Claro que pensaba que un piso no era lugar para él, pero la única alternativa que le quedaba era morir. Salvo casos similares no soy partidario de tener animales en cautividad. Me encantan, pero cuando veo las condiciones en las que muchos sobreviven se me parte el corazón. Los perros, y en menor medida los gatos, se han acostumbrado a vivir con el hombre. En muchas ocasiones el hábitat y el amor que algunas personas les proporcionan justifica tenerlos (más si son de perrera). Pero a algunos freakies les gusta tener animales exóticos o peligrosos en casa, confinados en espacios diminutos. La siempre cuestionable excusa es que los animales pequeños, roedores, reptiles, peces, arácnidos, insectos o anfibios no sienten. Todo el mundo es consciente de la inteligencia y los sentimientos de un perro. Ya no digamos de un gorila o un chimpancé. Pero al "bajar" a animales "menores" la inteligencia y por tanto el derecho a vivir dignamente se reducen...

El Universo es extenso, ilimitado, infinito. La probabilidad de que la Tierra, con toda su diversidad, sea el único planeta en el que haya vida es (a mi entender) nula. Que el nuestro sea el único planeta poblado de vida inteligente es altamente improbable. Pero que exista una civilización más avanzada que la nuestra que nos pueda llegar tratar como nosotros tratamos a nuestros animales es impensable... espero.


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