miércoles, 16 de noviembre de 2011

MASA CORPORAL

Estoy delgado. Si se compara mi masa corporal con el promedio de varones de mi edad en el continente europeo o norte americano se puede considerar que me "faltan" algunos quilos. ¿Para qué? ¿Para llegar a dónde? ... Como soy bastante alto todavía se me nota más. No existe ningún peso ideal, lo importante es tener buena salud y encontrarse bien. El resto son estadísticas y comparaciones.

Sin embargo estar delgado está socialmente bien visto, y hay más gente intentando adelgazar que engordar (en los países occidentales y todavía ricos como el nuestro). Por ello hay una cierta laxitud a la hora de remarcar mi delgadez que no existiría en el caso contrario.

Prácticamente cualquier persona que me encuentro, que no veo desde hace más de un mes hace el mismo tipo de comentarios: "¡Estás muy delgado!" "Cada día estás más delgado" "¿Te has adelgazado?". Yo debería responder "Y tú cada día estás más gordo" "Cada día estás más viejo" "Cada día estás más calvo" "Cada día estás más feo". Probablemente me acercaría a la realidad más que ellos, pero no lo hago porque por cortesía se acepta la delgadez pero no la obesidad, la constatación del inevitable paso del tiempo, la alopecia o la fealdad. Aunque podría remarcar otros atributos, "Cada día estás más alto, más bajo, más miope, más zurdo, más monógamo, más heterosexual,..."

Cualquier atributo físico, "bueno", "malo" o indiferente, cualquiera, que te lo repitan el número suficiente de veces se puede llegar a hacer pesado. Si cada vez que te ve cualquier persona remarcara tu altura, tu masa corporal, el color de tu pelo o tu lunar en el prepucio lo acabarías aburriendo. Podrías llegar a pensar que tienes un problema o simplemente podrías acabar hasta la bolsa escrotal de escuchar siempre la misma frase.

Es por ello que siempre que veo una persona con atributos estadísticamente diferenciados me cuido bien de no recordárselos. Imagino que puede estar saturado de comentarios sobre su particularidad, y no quiero ser yo el original de turno que se demuestre incapacitado para mantener una conversación alternativa.

Ello es extrapolable a la parejita joven de la boda que todos machacan con "¿Y vosotros para cuando?" "¿Sois los próximos?". Pues igual no se quieren casar. O uno sí y el otro no y están en crisis encubierta por ello. O simplemente están hasta los genitales respectivos de escucharlo.

Por no hablar de la parejita en edad fértil que va a visitar a un neonato y los neopadres les preguntan "¿No os animáis?" "¿Venga que nuestro chiquitín quiere un amiguito para jugar?" "A ver si os ponéis las pilas". Pues podría ser que lleven años intentándolo y les recuerdes lo que les cuesta a ellos y lo fácil que ha sido para ti. O que uno quiera y el otro no y están en crisis encubierta por ello (esta frase me suena). O que no quieran tener hijos, o no puedan o simplemente estén hasta los genitales respectivos de escucharlo (bis). Y encima tienen que mentir diciendo que el bebé es guapo. Pues no, es feo, y no se parece a nadie de la familia, todavía no han tenido tiempo de moldearlo. Ya le llegará.

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